«La máscara del teatro clásico, sin embargo, no fue inventada para ocultar sino para «sonar», per sonare, es decir, para dejarse escuchar. El yo que es persona es consciente de sí porque es consciente del mundo. El yo narcisista se ahoga en un espejo».

Fuentes, Carlos: En esto creo, Seix Barral, Barcelona, 2002

Avatar de Desconocido

Escrito por Oscar Cruellas

Deja un comentario