Con todo lo que está cayendo desde el punto de vista económico, el paro, etc, estaba releyendo Edipo rey de Sófocles, para ver si de esta forma dejaba la realidad angustiante. De hecho lo conseguí. Sófocles nos describe en Edipo rey la grandeza del hombre y al mismo tiempo sus grandes culpas y miserias. Fijaros que Sófocles tenía un cierto temperamento religioso, lo cual le hacía aceptar el mundo, al que juzgaba trágico en su estructura. Pero, y esto es lo importante, reflejaba la concepción -propia de la Atenas de Pericles– que iba situando al hombre cada vez más en el centro del universo. Esta obra se representó por primera vez en torno al 430 d.C. La historia es la siguiente: en el momento de nacer Edipo, hijo del rey Layo y de la reina Yocasta de Tebas, una profecía había anunciado que mataría a su padre y se casaría con su madre. Por ello, fue abandonado en una colina, y allí fue salvado por un pastor y educado en Corinto, desconocedor de su origen. En un lugar cercano a Delfos mató involuntariamente a su padre, después llegó a Tebas, donde se casó con Yocasta y tuvo hijos con su propia madre. Todo un drama. Pero de dramas hay muchos, como por ejemplo los cinco millones de parados que tenemos en España.